viernes, 16 de enero de 2015

¿Está en crisis la responsabilidad social?

Muchas en empresas han basado en la Responsabilidad Social su estrategia para sobrevivir a la crisis económica que estamos padeciendo. La Responsabilidad Social (RS) es una oportunidad que han tenido las empresas para desarrollarse y posicionarse en el mercado atendiendo a los pilares de la misma: económico, social y medioambiental.

La crisis del modelo empresarial, la crisis económica, la crisis ambiental… ha obligado a los empresarios a replantearse la manera de enfocar su modelo de negocio y han aprovechado para modificar su filosofía empresarial. Gracias a la RS las empresas han tomado mayor conciencia colectiva y, en parte, han alejado el desarrollo de su negocio de la única premisa de oferta y demanda, dando cabida a otros atributos empresariales.

Por todo ello, personalmente, no creo, o quiero no creer, que la Responsabilidad Social Empresarial esté en crisis. Las empresas no pueden desechar todos aquellos avances que las han ayudado a mejorar en una situación difícil porque la economía mejore o porque, poco a poco, estén notando algún tipo de mejoría.


Las compañías tienen que continuar desarrollando su Responsabilidad Social. Para ello, no cabe duda que tanto las empresas y los empresarios necesitan verse compensados por parte de las políticas estatales de algún modo (impuestos, subsidios, regulaciones), de manera que se pueda velar e impulsar esta forma de entender la organización en que la responsabilidad para lo que nos rodea forma parte de la estrategia.
 
Otro aspecto que habría que tratar de desvincular de la RS, para evitar que ésta pueda sufrir una crisis real, es el cortoplacismo que se trata de ver en la rentabilidad. 
 
Responsabilidad social empresarial (RSE) como ventaja competitiva. Manuel Reyno Momberg
 
Es muy fácil para un directivo tomar decisiones que contribuyan a mejorar la sociedad cuando éstas son rentables para su empresa pero más difícil hacerlo cuando éstas no repercuten positivamente en su modelo de negocio. Los empresarios deberían tener una visión a largo plazo cuando apliquen estas medidas ya que no hay mejor carta de presentación para cualquier negocio que el reconocimiento y reputación positiva por parte de sus consumidores y usuarios.

La RS puede ser el elemento que haga a una empresa diferenciarse del resto, conseguir o mantener su ventaja competitiva en el mercado, al desarrollar un proceso de gestión diferente, original y afín a la globalización empresarial.

Por todo esto, no se puede afirmar que la Responsabilidad Social esté en crisis, tan solo hay que continuar trabajando para que los empresarios vean en ella el atractivo necesario para permanecer“vivos” en un ambiente de alta competitividad.